La denominada dieta
blanda es un régimen especial de alimentación recomendado
frecuentemente para aliviar diversas afecciones del aparato digestivo, como
úlceras, reflujo gastro-esofágico, gastritis, vómitos, diarrea por diferentes
causas, etc.
La dieta blanda,
también llamada dieta de protección gástrica, incluye alimentos de fácil
digestión, que no causan irritación y que estimulan mínimamente la secreción
gástrica, para que el paciente pueda recuperarse más rápidamente de su
afección.
Dentro de los alimentos
que constituyen la dieta blanda, se encuentran:
·
Carnes y pescados. En la
dieta blanda se pueden incluir carnes rojas magras, pollo y pescado cocidos a
la plancha, al horno o hervido. Evitar los fritos, las carnes con alto
contenido graso y los mariscos.
·
Lácteos. Si el paciente
los tolera, pueden incluirse lácteos desnatados en la dieta blanda, aunque no
se recomiendan en los pacientes con diarrea.
·
Frutas y Verduras. Se
deben evitar las frutas y verduras crudas, pero pueden consumirse cocidas, en
compota, etc.
·
Grasas. Por lo general,
se pueden incluir pequeñas raciones de aceite de oliva, mantequilla o
margarina, siempre que el paciente lo tolere.
Además, en la dieta
blanda no se recomienda el consumo de alimentos picantes, salsas, dulces,
chocolates y alcohol.
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