Un
investigador de la Universidad de Alabama acaba de proponer una curiosa teoría
sobre la obesidad. ¿Eres una de esas personas que no pierde peso aunque haga
una y otra dieta?
Para Archer, la reducción de la actividad física y el aumento de comida disponible, han derivado en incrementos acumulativos de la energía de las madres humanas (mayor masa corporal y adiposidad) y en reducciones en el gasto energético y en el control metabólico.
Ayúdenme a hacer llegar esta información a todas las futuras madres posibles. El futuro de su descendencia podría depender de ello.
La propuesta de
Archer se titula "La epidemia de obesidad infantil como resultado de la
evolución no genética: la hipótesis de los recursos maternos" y tiene
sentido.
Esto
habría reducido la competencia entre las demandas energéticas de la madre y el
feto, aumentando la disponibilidad de energía en el medio intrauterino.
La
conclusión en palabras más sencillas, es que NO HAY QUE TENERLE MIEDO A LA
ACTIVIDAD FÍSICA DURANTE EL EMBARAZO, a lo que si habría que tenerle miedo es a
un embarazo sedentario, pues puede condicionar negativamente el metabolismo de
sus hijos.
Si
será una hipótesis cierta o no, aún no lo sabemos, pero me quedo con la
conclusión final del artículo: "La evolución es la causa, y las madres son
la solución".
No hay comentarios:
Publicar un comentario