“No puedo comer mañana #thinspo #thinspiration” es la frase que
publicó @StarvingAngeI en Twitter, acompañada de cuatro fotografías de mujeres
muy delgadas. A ninguna se le ve el rostro y todas están en poses atractivas.
La etiqueta
#Thinspiration y su versión corta #thinspo surgen de la combinación de las
palabras en inglés ‘thin’ (delgado) e ‘inspiration’ (inspiración). Agrupan
mensajes generados por jóvenes, hombres y mujeres, que buscan exhibir cuerpos
ultra delgados con la finalidad de volverlos estereotipos de belleza. Los
viralizan en diferentes redes sociales; las más usadas son Twitter, Pinterest e
Instagram.
En el último mes
se han generado más de 26.000 mensajes con ambas etiquetas solo en Twitter, lo
mismo que ha generado en los últimos siete días el Mundial de Fútbol Femenino.
Para las personas
que impulsan este tipo de contenido, la anorexia y la bulimia reciben los
apodos de “Ana” y “Mía”, respectivamente. Por ejemplo, en el blog de Princesa
Lorelei Proana se lee: “Ana es tu amiga, nunca lo olvides. Ella ve tu
sufrimiento a diario, escúchala. Ana te ayudará a alcanzar el peso de tus
sueños”.
La conducta de
personificar enfermedades, explica el siquiatra Gustavo Constaín, es una forma de generar una relación
de afecto con el trastorno: “Las personas que sufren anorexia y bulimia están
convencidas de que no son enfermedades, las ven como necesidades para
mantenerse en buena forma. No aceptan críticas y, por eso, tratan de sentirse
bien llamándolas como amigas”.
No es nuevo en la web
Aunque los blogs
que promueven estos trastornos no son nuevos, el hecho que, con las etiquetas
en redes sociales, estos mensajes lleguen al público sin ningún tipo de
restricción preocupa a la academia.
Los Investigadores Jannath Ghaznavi y Laramie Taylor, de la Universidad
de California, publicaron en junio de 2015 una investigación en la que
analizaron la tipología de 300 imágenes seleccionadas al azar en Twitter y
Pinterest, acompañadas de las etiquetas #thinspiration y #thinspo.
El estudio
publicado en la revista de investigación Body Image determinó que mostrar
partes del cuerpo, como el torso, sin exhibir el contexto de la figura humana
completa, convierte esa imagen en un objeto aspiracional y las mujeres jóvenes
pueden sentir insatisfacción corporal y, por lo tanto, es posible, que esto
incite desórdenes alimenticios.
¿Tiene solución?
Algunas redes
sociales han tratado de combatir la difusión de la anorexia y la bulimia entre
sus usuarios. Si se busca “anorexia” en Instagram aparece un aviso que permite
obtener información y ayuda sobre los trastornos alimenticios. En Tumblr se
prohíben los blogs que promueven desórdenes de este tipo y se eliminan las
publicaciones que estimulen la auto lesión.
Si bien estas
estrategias tratan de combatir el problema, la restricción de acceso a mensajes
en redes parece lejana. Una herramienta informática creada por Dail Software,
empresa de la Universidad Politécnica de Madrid especializada en Ingeniería
Lingüística, que recogió los tuits con las etiquetas #ana y #mia publicados
desde el primero de junio de 2014 hasta la misma fecha en 2015, logró
identificar 1.005 combinaciones de etiquetas que aparecen junto a #ana y #mia
en Twitter, lo que indica que bloquear los nombres reales de las enfermedades solo
fomenta que surjan nuevas estrategias para hablar de los trastornos de otras
maneras.
El bloquear
usuarios tampoco es una solución fácil. Hay algunos usuarios que se dedican a
promover la estética exageradamente delgada y que incluso cambian su nombre por
el peso que van perdiendo cada semana, como @Bones_O6 que se nombra Ladie Gorda
-6’5kg. Si estas cuentas fueran bloqueadas, las mismas personas crearían nuevas
con otros seudónimos.
La difusión de
estas imágenes en redes se presenta, según el siquiatra Constaín, como una
forma de convencer a sus seguidores de que la anorexia y la bulimia no son
enfermedades y que se puede vivir con ellas, además, las imágenes publicadas
sirven como ejemplo para otras personas que sufren estos trastornos, para que
vean lo que se puede lograr, explica el también docente e investigador de la
Universidad Pontificia Bolivariana.
También han
tratado de implementar sanciones legales. España, Francia, Italia e Israel han
creado multas para las agencias que contratan modelos demasiado delgadas. Para
el siquiatra Constaín, salir de estas enfermedades depende de factores como el
apoyo de la familia, la atención médica y psicológica y el conocimiento de
estudios científicos que muestren los efectos negativos de estos trastornos.
publicado por: http://www.elcolombiano.com/